La sociedad y sus códigos morales nos ha enseñado que la identificación es una cualidad positiva en la interacción del hombre y de los pueblos, con la que se muestra tener empatía con alguien o algo, y es la principal energía que crea en el mundo todas las manifestaciones de espontaneidad, pasión, entusiasmo, sinceridad e inspiración.
En realidad bajo el análisis de la práctica y desarrollo del sentido de la Auto Observación psicológica, este concepto aprendido siempre, es algo errado. Este error queda claro cuando descubrimos que todo proceso de identificación, utiliza grandes cantidades de energía psíquica para penetrar o mantener la atención ante el objeto, sujeto, impresión o lugar.
Todos reaccionamos ante los problemas identificándonos con ellos, entonces somos absorbidos por esa legión de pensamientos y
emociones y la atención al problema se incrementa de tal forma que perdemos el equilibrio y la moderación.
En ese momento nuestra mente se parecería a un caballo descontrolado corriendo por las avenidas de la vida, sin control, entonces se nos hace difícil calmar la mente ante la turbulencia de pensamientos y emociones que nos llegan y nos olvidamos completamente de nosotros mismos, sucumbiendo ante las adversidades, llegando muchas veces a la desesperación.
Las malas noticias, los infortunios, los reveces de fortuna, las enfermedades, las traiciones… etc, son ejemplos palpables de las diferentes circunstancias que nos llevan a la identificación.
Cabe anotar que al identificarnos ya sea por un momento con algo o alguien, se desconecta la manifestación natural de la conciencia, ésta se duerme, cae hipnotizada y perdemos la conexión que teníamos con nuestro Ser a través de el “Recuerdo de Sí” y caemos en la fascinación.
Todas las personas que andan fascinadas por la vida, como lo demuestra el dibujo del Loco o Arcano 21 del Tarot ven que el mundo se reduce a una sola cosa, problema o persona y todavía hipnotizados pierden la voluntad de acción y la fuerza de la identificación del momento les domina.
Todo aquél que se encuentra en estado de identificación, se olvida de sí mismo, aunque sueñe y crea que está consiguiendo lo mejor de su vida, pero el tiempo nos enseña que por lo general esos impulsos no duran mucho…
El brillo de la identificación por este u otro detalle de repente se desvanece y en su lugar aparece otro interés, demostrando que casi nadie posee en la actualidad una verdadera continuidad de propósitos.
Comprendiendo entonces que la identificación es una fuerza que nos desliza por la ladera de olvidarnos de nosotros mismos, se hace importante estudiar a fondo este proceso y sus múltiples manifestaciones, en especial la manera sutil con la que la identificación se disfraza ante nuestro entendimiento.
Existen formas de identificación que son diarias y espontáneas, absurdas e incoherentes y otras mucho más fuertes que influyen en la sociedad, que mueven las masas y hasta determinan nuestro comportamiento.
Ejemplos de estos tipos de Identificación son: Levantarnos de la cama, alistarnos para ir a trabajar, abrimos la ventana para ver el tiempo y si llueve o está nublado nos identificamos y nos molestamos por eso, si el día está soleado nos identificamos y nos ponemos felices.
En este caso de identificación creemos que el tiempo, la misma naturaleza esta ahí para satisfacernos, en nos dar placer, si no es así relampagueamos y salimos de la casa con una pésima actitud ante el mundo, quejándonos durante todo el día.
Nos identificamos en los deportes, se apuesta dinero por quien esperan sea el ganador, y en el transcurso del partido de fútbol, pelea de box o lo que sea, la persona anda hipnotizada, grita fascinada, ante un gol de su equipo, se olvida completamente de sí misma.
Se identifican las personas con el alcohol, considerándolo un medio para resolver y analizar problemas. Conforme ingerimos alcohol, la capacidad de raciocinio se va disminuyendo y nunca resolvemos nada y terminamos peor que antes.
En todo esto existe la identificación y es claro que ante un conflicto cualquiera, por el hecho de una identificación masiva se han creado las pequeñas y grandes guerras en el mundo.
“Recordemos la Guerra en 1969 entre El Salvador y Honduras originada por el fanatismo y la identificación de un partido de fútbol.”
En relación al trato con nuestros semejantes, la identificación crea la simpatía, consideración o antipatía mecánica, todo se motiva de acuerdo a nuestros intereses y gustos.
La gente nos cae bien cuando son deferentes y respetuosas con nosotros, entonces sonreímos y decimos que son buenas personas, pero si alguien dice algo mal o dudan de nosotros, inmediatamente nos identificamos con lo que dicen y entonces empezamos a molestar a los que antes considerábamos e incluso a hablar mal de ellos.
Al estudiar la identificación nos damos cuenta que muchos de los valores y virtudes que nosotros creemos poseer o admirar en otros, pueden ser simples impresiones ilusorias que no suelen mantenerse por mucho tiempo, ya que todo está sujeto al vaivén de las antítesis de la mente.
El Venerable Maestro Rabolu nos enseña que existe una manera eficaz para despertar la conciencia en el diario vivir y esto se consigue con el trabajo que viene en contra de la identificación.
Un insultador, por ejemplo, un lugar desagradable o evento inesperado... Si nosotros no nos identificamos y hacemos un esfuerzo por no reaccionar y se observamos la diferente manifestación de los defectos, que llevamos dentro, descubriremos los “Yoes” de la Ira, del Orgullo, de la Venganza... si manifestar a través de los diferentes centros de la máquina humana, Centros Intelectual, Emocional, Motor e Instintivo Sexual.
Si estamos en los auto-observando, descubrimos a los diferentes defectos en acción que crean la charla interior, los agregados psíquicos que se identifican con las cosas, las personas, los eventos y reaccionan ante ellos, llevándonos a la fascinación y el adormecimiento de la conciencia.
Si no nos observamos de momento en momento no podremos separarnos de la influencia de los “Yoes” y caemos ante las diversas circunstancias de nuestra vida.
Con a auto-observación permitimos que la luz de la conciencia fluya y al descubrir un defecto en acción manifestándose en cualquiera de los centros, inmediatamente pedimos con fuerza nuestra Madre Divina que lo elimine o lo destruya (Muerte de los Detalles). Así evitamos que el “Ego” se fortalezca, porque vamos le quitando el alimento, la energía y mantenemos siempre la recordación de sí mismo.
Tenemos que vivir en el presente, recordando que todo en el mundo pasa, que un problema pasa, que cada cosa no debemos dar más que su importancia debida y que es mejor mantenemos la conciencia y la voluntad, al contrario de caer dominados y vivir sujetos al estado de la fascinación y sueño profundo.
Este sistema fortalece formidablemente el poder de la concentración, que mantiene la mente enfocada únicamente en lo instante, viviendo lo aquí y lo ahora, así vamos avanzando en el conocimiento de nosotros mismos.
A Auto Observación Psicológica, la Concentración y la Muerte Mística son el método que en estos estudios gnósticos hemos aprendido para romper la influencia de la identificación e ir avanzando en el trabajo de la gran Obra.
Paz Inverencial!
*Colaboración hermanos gnósticos S.O.S.