Podemos y debemos cultivar el Silencio interior en nuestra vida.
Cultivarlo en las diferentes circunstancias y situaciones de nuestra vida cotidiana.
Dios es Dioses. Unidos por el Silencio de la Omnisciencia, la Omnipresencia y la Omnipotencia.
Nuestra voluntad de Paz y armonía interior es el principio que nos conecta con nuestro Ser (nuestros Padres Internos) y con los Dioses.
Perennemente, esta voluntad es también la memoria íntima de uno mismo; es también el conocimiento y observación directa de los diferentes Yoes/defectos y de la Esencia en nuestro mundo interior.
En nuestro mundo interior, dentro de nosotros, en oposición al Yo y su fuerza, está la fuerza revolucionaria de nuestra Esencia.
Esta fuerza revolucionaria en nosotros no está en el "extremo" de la alegría, ni en el "extremo" de la tristeza.
Esta fuerza revolucionaria en nosotros se encuentra en el equilibrio interior y el silencio que debemos buscar y mantener en todo momento.
En el silencio de nuestro equilibrio interior, pidiéndole a nuestra Madre Divina, Ella, con su poder flamígero , mata, quema y desintegra cualquier defecto yo, previamente detectado y observado.
CONDUCTA PARA EL EQUILIBRIO, SILENCIO INTERIOR y MUERTE EN MARCHA
- Evitar sobrecargar el Centro Intelectual con “cosas” de redes sociales y multimedia para facilitar el control emocional.
- Alimentar la Esencia de forma equilibrada con música armoniosa y música clásica.
- Leer las obras gnósticas de los grandes Maestros.
- Cultivar perennemente la cultura del autoconocimiento.
- Más contacto con la naturaleza en bosques, selvas, ríos, cascadas, mar, montaña, etc.
- Prácticas gnósticas con constancia, de autoobservación, muerte en marcha, meditación, proyección astral...
Paz Inverencial!
Colaboración: hermanos gnósticos del S.O.S. (2º Canon)